ESTE ES EL COLOR E PELO QUE DEBERÍAS DARTE DESPUÉS DE LOS 60

La elección del color de cabello después de los 60 años depende en gran medida de tus preferencias personales, estilo de vida y tono de piel. No existe un color específico que debas usar a esa edad, ya que la belleza es subjetiva y lo más importante es sentirte cómodo y confiado con tu elección.

Sin embargo, a medida que envejecemos, es común que el color natural del cabello cambie y que aparezcan canas. Algunas personas optan por mantener su color natural, mientras que otras prefieren teñirse el cabello para cubrir las canas o para cambiar su apariencia.

Si decides teñirte el cabello, aquí hay algunas consideraciones generales:

  1. Colores naturales: Elegir un color de cabello que sea cercano a tu color natural puede verse más favorecedor y requerir menos mantenimiento. Los tonos de cabello que son uno o dos tonos más claros u oscuros que tu color natural suelen funcionar bien.
  2. Tonos cálidos: Los tonos cálidos, como rubios dorados o castaños cálidos, pueden agregar calidez a tu rostro y contrarrestar la palidez que a menudo se asocia con el envejecimiento.
  3. Evita colores demasiado oscuros: Los colores de cabello muy oscuros pueden enfatizar las líneas de expresión y hacer que tu rostro parezca más duro. Opta por tonos más suaves.
  4. Mantén el contraste: Mantener cierto contraste entre el color de tu piel y el color de tu cabello puede ser halagador. Por ejemplo, si tienes la piel clara, un color de cabello más oscuro puede resaltar tus rasgos. Si tienes la piel más oscura, tonos más claros pueden funcionar bien.
  5. Considera la salud de tu cabello: A medida que envejecemos, el cabello tiende a volverse más frágil. Elige productos de coloración suaves y utiliza tratamientos capilares para mantener la salud de tu cabello.

Recuerda que no hay reglas estrictas en cuanto al color de cabello que debes usar después de los 60. La decisión final debe basarse en tus preferencias personales y cómo te sientas más cómodo y seguro con tu apariencia. Además, es una buena idea consultar con un estilista o colorista para obtener recomendaciones específicas según tu tipo de cabello y tono de piel.